La terraza de la piscina es ideal para comer al aire libre. Durante el día, se sirven comidas sencillas, así como frescos cocos tiernos y fruta local.
Por la noche los huéspedes pueden cenar antipasti y platos caseros mientras se relajan en las tumbonas y se dejan llevar por el brillo de las estrellas y el reflejo de los árboles sobre el agua de la piscina.