Este restaurante al aire libre y sobre el agua está compuesto por unas acogedoras cabañas de 2 plantas de altura equipadas con unos confortables futones a modo de asiento.
El Longitude ofrece cada mañana un abundante desayuno para comenzar el día de la mejor manera posible. La cena, por su parte, consiste en un menú internacional a la carta con platos de pescado fresco, carnes a la parrilla, pastas y sabores asiáticos.
Los amantes de la comida vegetariana encontrarán una gran variedad de opciones sanas y exquisitas entre las que elegir, así como los que busquen platos elaborados con productos orgánicos o de la zona.